miércoles, 20 de abril de 2011

(7) De cómo y por qué me convertí en botella

Me gustaría retomar una cuestión que ya os he planteado más veces a lo largo de este pequeño serial, y digo serial porque no sabría cómo definirlo. En realidad se trataría de un pequeño relato enmarcado entre la realidad y la ficción, entre lo posible y lo imposible. En él, recojo vivencias, anécdotas, verdades, sueños, reflexiones, vida y esperanza, sobretodo esperanza.
Pero, ¿alguna vez has pensado que se siente viajando dentro de una botella al capricho de los mares, corrientes y tempestades?
.              .              .
… se alzan varias columnas de cajas, un total de 185. Mi despacho parece, pues eso, ¿un almacén?, ¿una pequeña nave industrial?
Cada una de las cajas contiene 8 botellas-cantimplora, bueno todas no, una llegó sólo con 5, al parecer no quedaban en stock las 2000 que se habían pedido. Hacía tiempo que decidimos ir trasladándolas al almacén de la oficina una vez que la gotera del techo había sido reparada, por cierto Luz, gracias, tu hermano nos ha ahorrado mucho dinerillo. Pero el tiempo escasea y siempre hay otras prioridades.
Al ver el albarán de entrega me quedé perplejo, ahí estaba otra vez, ¿empezaba a tener sentido todo? En el apartado “cantidad” figuraba un número muy familiar, 1477. Mi número, mi mensaje, mi botella… ¿os acordáis? …En este pequeño trozo de papel encontrarás todo lo que necesitas saber, ni más ni menos. Ten paciencia y tu propio camino te desvelará el resto
.              .              .


“En muchas ocasiones he pensado en escribir un mensaje, meterlo en una botella y dejar que el mar lo llevara allá donde el caprichoso destino quisiese hacerlo llegar. Pero nunca lo he hecho, y creo que nunca lo haré”
Mi vida se desarrolla día a día en una sociedad marcada y envuelta en una profunda crisis de valores. Y cuando hablo de “crisis de valores”, no quiero referirme a que hoy no haya una conciencia social respecto a las realidades humanas y una preocupación por atender a los colectivos más desfavorecidos e incluso a cuidar nuestra naturaleza sino más bien, a ese proceso de pérdida de consciencia de la misión personal, ¿quién soy?, ¿hacia dónde camino?, ¿cuál es el sentido de mi vida?
Y en ocasiones nos dejamos llevar por ese “océano social”, en ese mar monótono de la falsa calma, rota tan sólo por las tempestades artificiales creadas por nosotros mismos, quizá para poder ensordecer el  ruido aterrador del silencio, ese silencio al que tanto miedo le tenemos y que nos muestra en la intimidad de uno mismo, la realidad en la que nos hayamos perdidos.
Perdonadme por estas notas filosóficas pero es que de lo que hoy os hablo, va más allá de nuestra vida y transciende a lo verdaderamente importante de nuestro ser. Además ¿cómo si no os explicaré que nunca lanzaré una botella?
A lo largo de estas líneas, perdonadme nuevamente pero no soy escritor, he intentado haceros llegar de otra forma algo que en realidad es muy simple.
_________________________
ME HE CONVERTIDO EN BOTELLA PARA HACEROS LLEGAR 1477 MENSAJES REALES, ESCRITOS POR NIÑOS Y NIÑAS QUE TIENEN “UN SUEÑO” QUE CUMPLIR, UNA VIDA POR VIVIR, UNA OPORTUNIDAD PARA DESARROLLARSE PLENAMENTE Y AYUDAR TAMBIÉN ELLOS A SUS FAMILIAS Y COMUNIDADES.
AQUÍ EMPIEZAN ESAS HISTORIAS DE LAS QUE OS HABLABA, ESOS SUEÑOS QUE HOY COMPARTO CON VOSOTROS PARA QUE “NO LOS DEJÉIS ESCAPAR”
_________________________

En breve os diré lo fácil que es ayudar a cumplir uno de esos sueños y os explicaré de qué niños se trata, cómo viven, qué necesitan y cómo comprando una de estas botellas les ayudaréis a que el día de mañana puedan decir que su SUEÑO, ese que nos enviaron en una botella, se ha cumplido

GRACIAS A TODOS DE ANTEMANO
YO TAMBIÉN OS QUIERO


BRAYAN ALVARADO DE LEÓN
9 AÑOS
PUEBLA (MÉXICO)

"Yo quiero ser doctor para ayudar ala gente paque nose enfemen"
(Transcripción literal de su mensaje)

No hay comentarios:

Publicar un comentario